Así se desarrolla el Censo Nacional de Alfabetización: según monitoreo de Urnas Abiertas

El pasado sábado 10 de junio dio inicio el Censo Nacional de Alfabetización, el cual se llevará a cabo hasta el 30 de junio, según fuentes oficiales.

A pesar de que el monitoreo realizado por las redes ciudadanas no registra mayores incidentes de violencia política, es importante señalar que el Censo se ha desarrollado bajo un absoluto control partidario.

Además de trabajadores del Estado, se ha observado presencia policial y de operadores políticos del FSLN (secretarios políticos, CPC, miembros de la Juventud Sandinista y de las Unidades de Victoria Electoral, entre otros) junto a los equipos de encuestadores.

En algunas zonas rurales se denunció intimidación policial contra familias que se negaban a dar información. Asimismo, se registraron denuncias de docentes y trabajadores de instituciones estatales que revelaron estar siendo “presionados” por sus superiores para participar y llenar todas las encuestas asignadas, a pesar de la negativa de algunos pobladores. Esto les ha obligado a visitar las casas hasta en tres ocasiones en busca de dicha información. 

De acuerdo al monitoreo realizado por Urnas Abiertas, las personas encuestadoras que visitan las casas son trabajadores de diferentes instituciones gubernamentales que portan identificaciones, entre ellas: 

• Ministerio de Educación (MINED)
• Ministerio de Salud (MINSA)
• Instituto Nacional de Seguridad Social (INSS)
• Alcaldías y Gobiernos Regionales
• Policía Nacional 
• Poder Judicial

Urge “Censo Nacional” de la población

Desde 2005 Nicaragua no cuenta con un Censo Nacional de la población. Antes de 2018 se programó la aplicación de un nuevo censo, sin embargo, fue suspendido debido a que el gobierno consideró que “no había condiciones para que las personas dijeran la verdad y atendiera a desconocidos”, indicó una fuente.

Estas condiciones no han cambiado debido a la violencia estatal y el estado policial de facto que impera en el país. El gobierno en lugar de trabajar por transformar estas condiciones para construir estadísticas creíbles, ha montado un Censo Nacional de Alfabetización bajo control policial y partidario que no genera confianza en la población, lo que a su vez desmotiva una participación adecuada.

Es obligación de las autoridades generar información, estadísticas y datos creíbles de la población, para así diseñar e implementar políticas públicas que solucionen las diferentes problemáticas que enfrenta el país. La ausencia de un Censo Nacional limita los análisis tanto de organizaciones nacionales como internacionales. 

En los últimos 18 años, que no ha existido un Censo Nacional, en el país se ha trabajado con estimaciones y supuestos que ya no son válidos debido especialmente a las grandes oleadas migratorias que se han dado a partir de 2018. De acuerdo al Servicio de Migración de Estados Unidos, en 2022 detuvieron a 217,000 nicaragüenses que intentaron cruzar la frontera de manera irregular. Y al menos 20,000 nicas esperan la aprobación del parole humanitario para ingresar legalmente al país norteamericano.

Actualmente, es imposible saber cuántas personas se han ido o cuáles son los recursos humanos con los que se cuenta en el país, debido a que muchas de las personas han salido por puntos ciegos y de que el Estado tiene información muy desactualizada. Un censo nacional permitiría conocer con mayor detalle las dinámicas demográficas del país, las cuales han sido impactadas por la violencia política, la pobreza, el desempleo, los conflictos territoriales en la Costa Caribe, entre otros fenómenos.

La encuesta aplicada desde el 10 de junio pide información respecto al estado de la vivienda, la población señala tener desconfianza ante este tipo de preguntas ya que el MINED, que es el ministerio a cargo del proceso, no ha informado a qué se debe el levantamiento de estas variables, pues hasta el momento nada más han indicado que a través del Censo se está realizando un “diagnóstico, a través de estadísticas e indicadores, sobre los niveles en términos de educación”.

Actividades políticas el fin de semana

Durante el sábado 10 y domingo 11 de junio adicionalmente se desarrollaron otras actividades políticas del FSLN, entre ellas Dianas aún bajo la lluvia, jornadas de salud y   ferias económicas y deportivas; todas marcadas por el proselitismo político y uso de recursos públicos para dichos fines.